El poeta colombiano León de Greiff (1895-1976), publica su primer libro en el mes de enero de 1925: Tergiversaciones, impreso en la Tipografía Augusta de Bogotá. Cien años después, al revisar el “orden del libro” de este “primer mamotreto”, como lo llama su autor, sobresale lo fantástico y misterioso. De igual forma, ese “orden” parece hacer parte del catálogo del Cancionero General de Juan Alfonso de Baena (h.1425) o de algún otro repertorio de la poesía amorosa y cancioneril del siglo XV, tan decisiva para la expresión del amor humano por su énfasis en la exaltación del deseo.
Asimismo, suenan en Tergiversaciones las “músicas extrañas” que aparecen en los libros de música de Luys Milán, Miguel de Fuenllana, Diego Pisador o de cualquier otro vihuelista del siglo XVI. En el libro hay también ecos de acordes de vihuelas y tiples del Cancionero de Antioquia de la tierra colombiana, publicado igualmente en 1925 (el tiple es un instrumento musical de cuerdas pulsadas, típico de la Región Andina de Colombia, inspirado en la vihuela española).
Cancionero Baena. Prólogo. El poeta enamorada y fingidor
Cancionero General. Folio 1. Siglo XV
Ejemplar para el amigo patrocinador de Tergiversaciones
Asimismo, suenan en Tergiversaciones las “músicas extrañas” que aparecen en los libros de música de Luys Milán, Miguel de Fuenllana, Diego Pisador o de cualquier otro vihuelista del siglo XVI. En el libro hay también ecos de acordes de vihuelas y tiples del Cancionero de Antioquia de la tierra colombiana, publicado igualmente en 1925 (el tiple es un instrumento musical de cuerdas pulsadas, típico de la Región Andina de Colombia, inspirado en la vihuela española).
Los tres otrosyóes de León de Greiff, Matías Aldecoa-Leo Legris-Gaspar de la noche, autores del libro Tergiversaciones, se declaran además amigos de correrías y malandanzas de François Villón (1461-1463) y Paul Verlaine (1844-1896), así como de los poetas malditos. Dicen ser también contemporáneos de Luis de Góngora (1561-1627) y de Francisco de Quevedo (1580-1645).
Es decir, León de Greiff tergiversa la tradición y experimenta con los lenguajes artísticos para inventar (encontrar) una poética y unas escrituras incorporadas a la materialidad del espacio de la página manuscrita o impresa, así como al tiempo, o a los momentos, de decir, ver o leer sus composiciones.
De tal manera que la poesía fluye desde León de Greiff con tanta intensidad que no se limita a su presente, al instante de su escritura. Más bien, se despliega, simultáneamente, en el pasado, el presente y el futuro. Se trata, entonces, de un ver, leer, oír, escribir y decir renovador y creador que se revela como un hecho, como algo que sucede, que está ocurriendo, tal vez, “como delante de nosotros”.
Caricatura
Página Cancionero. 1525 – BNE
Viñeta y título interior de Tergiversaciones
Autorretato de LG h. 1925
Fray Luis Lautremont y Rimbaud en la biblioteca de LG
Imágenes de obras de Quevedo, leídas por LG
Tergiversando desde la tradición
Borrador manuscrito poema de Tergiversaciones
El coro de los tipos de imprenta Bogotá, 1920
Vamos, pues, a invocar de manera formal y ritual parte del mundo de León de Greiff, mostrando la urdimbre de Tergiversaciones, a través de momentos de su amplia vida textual, para sentir la corteza y el sonido de sus palabras.
Nos orienta lo escrito y dicho por el maestro de Greiff en su “Correo de Estocolmo”, el 31 de agosto de 1961(curiosamente, escojo estas palabras el 31 de agosto de 2025, día mundial de la alegría):
Pensar que las palabras son sólo —apenas— música (para los no sordos y no lerdos) y que toda la música (por modo virtual) se alberga en la palabra (como se la sepa tañer). Idear, intuir y sentir que las músicas son sólo —apenas— ecos, que todas las palabras ecos son de la música. Oxte el sentido lato! Maese turulato, mentecato (…) Pensar que de las sílabas se forjan las Sonatas, como así de las notas o quier neumas se engendran los Sonetos (los de “veras” no los adocenados —acatorcenados—, en serie, manufacturados para henchir volúmenes y volúmenes vacuos).
Recorreremos la vida textual de Tergiversaciones, que puede comenzar hacia 1425 y llega hasta hoy, deteniéndonos en testimonios de un archivo documental, textual, iconográfico, sonoro y bibliográfico de las prácticas de escritura y visión de mundo del poeta León de Greiff, construido en un proceso de investigación creación.
Ciertamente, el espacio que va desde León de Greiff al lector se revela como un fascinante organismo vivo y cambiante, al cual están vinculadas múltiples transformaciones y variaciones. Los escritos de diversos soportes -manuscritos, versiones mecanografiadas, publicaciones impresas y oralizadas, entre otros- y el mundo literario y cultural del maestro de Greiff, cambian en los ámbitos de escritura y también en los de lectura. Porque su mundo, obra y textos, no están solamente en el centro de páginas únicas “originales” a las que no se tiene acceso, sino en sus márgenes.
Es decir, en los territorios donde dialogan la creación, la circulación y la recepción de las obras culturales, artísticas y sociales. Adicionalmente, muchos testimonios de la obra y del mundo de León de Greiff, particularmente los ubicados en el ámbito de la difusión, están complejamente dispersos. De tal manera que el acceso a ellos en su conjunto, es necesario crearlo, tal como lo hemos ido haciendo.
Recorreremos la vida textual de Tergiversaciones, que puede comenzar hacia 1425 y llega hasta hoy, deteniéndonos en testimonios de un archivo documental, textual, iconográfico, sonoro y bibliográfico de las prácticas de escritura y visión de mundo del poeta León de Greiff, construido en un proceso de investigación creación.
Ciertamente, el espacio que va desde León de Greiff al lector se revela como un fascinante organismo vivo y cambiante, al cual están vinculadas múltiples transformaciones y variaciones. Los escritos de diversos soportes -manuscritos, versiones mecanografiadas, publicaciones impresas y oralizadas, entre otros- y el mundo literario y cultural del maestro de Greiff, cambian en los ámbitos de escritura y también en los de lectura. Porque su mundo, obra y textos, no están solamente en el centro de páginas únicas “originales” a las que no se tiene acceso, sino en sus márgenes.
Es decir, en los territorios donde dialogan la creación, la circulación y la recepción de las obras culturales, artísticas y sociales. Adicionalmente, muchos testimonios de la obra y del mundo de León de Greiff, particularmente los ubicados en el ámbito de la difusión, están complejamente dispersos. De tal manera que el acceso a ellos en su conjunto, es necesario crearlo, tal como lo hemos ido haciendo.
Una colección hallada
Discos llenos de hablas
Autorretrato en libro
Mujer tocando Laúd Boletín Radio Difusora
En efecto, no todos los documentos que se presentan aquí aparecieron completos, limpios y desinfectados, en un mismo sitio o ciudad y en buen estado de conservación. De suerte que para elaborar el archivo repertorio del mundo y de la obra de León de Greiff, del que mostraremos una parte, ha sido preciso consultar innumerables bibliotecas y archivos, públicos y privados; librerías de viejo, de Colombia y otros países; anticuarios; mercadillos de San Alejo; participar en subastas de libros y de documentos; entrevistar a personas que conocieron a León de Greiff o que lo han estudiado; de igual manera, se han frecuentado innumerables puestos callejeros de libros. Como fuentes secundarias de consulta y apoyo se han revisado cuidadosamente muchos estudios críticos, ensayos y comentarios sobre la vida y obra de León de Greiff, desde 1915 a 2025.
Lugar de hallazgos
La crítica textual contemporánea, buscando aproximar de la manera más fidedigna posible a las obras, establece como especialmente valiosos los referentes producidos en vida del autor. Sobre la base de esos principios, en el archivo/repertorio construido, se han incluido documentos que salieron o pasaron por las manos de León de Greiff o con los que tuvo que ver directa o indirectamente; desde 1915 (año de la primera publicación hecha por el poeta) hasta 1976 (año de la muerte de León de Greiff). Además de esos documentos, se introducen registros de fechas posteriores, particularmente del año del centenario del poeta (1995), que tienen algún interés documental o textual significativo, y que no han sido conocidos antes.
Del mismo modo, los criterios centrales de conformación del archivo están determinados por las particularidades a partir de las cuales el maestro de Greiff vinculaba los procesos creativos con la puesta en circulación de su obra y su mundo. Es muy interesante advertir cómo parte de la escritura de la maravillosa prosa poemática y oralizada de sus piezas radiofónicas, está en el momento de emisión y lectura de los programas de radio; en ellos, la voz, con su materialidad, condiciona, modifica y amplia las significaciones de los textos.
Documentos viajando en el espacio
Una biblioteca en Bogotá
Llamando a lista
Fragmento de balada mecanografiada única
Mss de guion radiofónico
El 27 de junio de 1961, León de Greiff escribe en el Correo de Estocolmo:
“Dormitábamos anoche homéricamente, luego de haber escuchado -mientras dactilograficábamos– los diez y nueve últimos apólogos de Lirón Lirónides, perpetrados durante nuestra inmediata ausencia y excursión”.
De Greiff, entonces, identifica su acto de escribir con dactilograficar: representar mediante figuras. Las letras son la representación visual del sonido de la voz humana, consignadas en la escritura; para plantarlas de modo que permanezcan y entregarlas por vía de depósito. Y a esta suerte de pagaré, así constituido, se puede acceder a través de la lectura de texturas y sonidos. Para hacerlo efectivo y recibir, así, las utilidades que aumenten nuestro caudal simbólico.
De otra parte, la dactilograficación de León de Greiff nos aproxima a la alta conciencia que tuvo el poeta del valor del lenguaje material de su mundo y de su texto, incluyendo urdimbres y soportes, y considerando desde su tamaño hasta las formas de las letras que componen su geometría, al igual que la puntuación y separaciones versales y estróficas.
Es así como muchas de las firmas de León de Greiff, son diferentes y tienen algún matiz de distinción. Varias de ellas pertenecen a alguno de sus otrosyoés, o corresponden a un momento particular de su autobiografía y del trazado de su obra. La mayoría se inscribe dentro de esa orientación cardinal de De Greiff tendiente a textualizar la vida y el mundo, revelándose, por medio de notas, manuscritos autógrafos, autorretratos y firmas, como marcas de fe o de autenticidad.
Tipo de nota en funda de discos
León de Greiff, excelente estadígrafo, llevaba registro detallado de todo lo suyo, acaso para personalizarlo; elaboraba, con letras dibujadas, detalladas listas y catálogos que escribía y firmaba aquí y allá, relacionando su significado con diseños y formas de ubicación en la caja de escritura. Mediante las letras de su nombre, o del de alguno de sus otrosyóes, De Greiff, en hermosos cuadernos, al final de un poema, en un libro, una tarjeta, una fotografía, un recibo o un disco, extiende verdades o ficciones, dejando también un legado de evidencias, sueños y enigmas.
De tal manera que es muy importante que los registros y testimonios dispersos estén reunidos, como en el archivo que hemos conformado, para una mejor lectura y valoración de esta trayectoria vital y poética magníficamente elaborada. Ella nos pone en contacto con una tentativa humana de creación, profundamente enriquecedora y estimulante.
Apunte de Matías Aldecoa
de la biblioteca de Gaspar
El repertorio que desplegaremos es único y de gran utilidad para abordar, desde la valoración especial de la materialidad de los textos, asuntos relativos a los procesos de creación, manifestaciones y registros de la conciencia artística, social y cultural de un gestor de lo escrito tan valioso como León de Greiff. Y, justamente, en este fascinante espacio y tiempo, palpitan su mundo y su obra. De tal modo que del contacto con estos documentos, como unidad aquí reunida, se deriva que trascienden el momento en el cual fueron originalmente escritos, o publicados, y pasan a situarse en el instante de su construcción, reescritura, lectura y consulta.
Firma de Leo (legris)
Firma temprana
Otra firma




